Conferencia General – Comunicación 1 – 17 de junio de 2022
Después de dos años de pandemia y de reuniones virtuales, estamos todas de nuevo en la Casa Madre, reunidas cerca del corazón de Marguerite Bourgeoys. La oración de apertura preparada por la hermana Ona Bessette, líder de la Congregación, marca el inicio de este encuentro internacional. La meditación sobre El Camino Sinodal: Una llamada a escuchar, dialogar y discernir unidas, me permite detenerme un poco en cada verbo.
La escucha es una actitud exigente; es necesario comenzar por crear un espacio dentro de mí para acoger a la otra persona. Porque escuchar es dar esperanza, es dar dignidad al otro, es actuar como Dios. Dios de amor, abre mi corazón para escuchar.
Dialogar implica varios pasos y me llama a arriesgarme a ser tocada, a arriesgarme a bajar la guardia y dejar que el otro me enriquezca, abriéndome así a la posibilidad de transformación. Dios de amor, enséñanos el diálogo verdadero.
Finalmente, caminar juntas como Iglesia o como Congregación es una invitación al discernimiento comunitario. Esto significa que la reunión que comienza esta tarde necesita de toda mi colaboración para que con las demás y apoyadas en el Espíritu optemos para la vida del mundo. Dios de amor, que el Espíritu de Pentecostés descienda sobre nosotras y guíe nuestro trabajo. Amén.